ENTRADAS COPA DEL REY? JE JE i JE !

Fuente : Elpelikano

La indignación es el sentimiento más generalizado entre los socios del FC Barcelona ante el exceso del cupo de entradas para la final de la Copa del Rey que se repartirán finalmente entre los compromisos tanto de la directiva del propio FC Barcelona como de la RFEF de cuya junta directiva es miembro destacado el presidente del club, Joan Laporta. Las cuentas ya se han acabado de definir tras el anuncio de la propia Federación Española de no poner a la venta ninguna de las entradas no repartidas a los clubs finalistas, Barça y Athletic. El rival azulgrana ha optado por realizar un reparto de la siguiente forma, 3.700 para sus compromisos y el resto (14.800) a la venta y distribución directa a sus socios. Respecto a la forma en que lo ha hecho la directiva azulgrana la diferencia radica en que el Athletic incluye en esa reserva del 20% del total (3.700 localidades), las que destinará al reparto de entre su peñas, mientras que en el Barcelona el cupo de las peñas se descuenta del grueso del destinado a los socios. Dicho de otro modo, porcentualmente irán a parar a manos de los socios azulgrana muchas menos entradas que en el caso del Athletic. “Como es habitual -podía leerse en la web azulgrana el pasado día 18- en las últimas temporadas, en eliminatorias de gran demanda, el 80% del total de las entradas disponibles por parte del FC Barcelona se destinarán a los socios y las peñas, mientras que el 20% restante serán para los patrocinadores y compromisos institucionales y deportivos del Club”.

Así, de acuerdo a los cálculos de diferentes medios,

cuatro de cada diez entradas de la final de la Copa del Rey, o sea 20.400 de las 50.000, el 40% del aforo, se reservan para los compromisos de los clubs y de la RFEF.

Para los muchos socios, miles y miles, del FC Barcelona que se van a quedar sin entrada para ese evento histórico, el hecho de destinar tantas entradas a compromisos institucionales y patrocinadores les parece una especie de burla, sobre todo después de secuestro de entradas de la final de la Champions en París, donde se distribuyeron entradas en función de amiguismos y del capricho de la mayoría de los directivos que, como ahora, dispondrán de un generoso cupo personal de entradas para administrar a su antojo. Consideran estos socios que la directiva no defiende la máxima presencia de socios en esta final lo mismo que en otros acontecimientos, priorizando algo tan poco concreto como los compromisos institucionales.

Lo que, colateralmente, aún se explica menos es que siga habiendo agencias oficiales del club azulgrana que, pese a a anunciar en su web -como es el caso representativo de Main Event, el mayorista de la distribución de entradas del FC Barcelona- que las entradas para la final de la Copa no se venden como agente oficial, sino procedente de proveedores externos, vendan entradas de tres tipos y a precios extraordinariamente abusivos. Choca porque si los clubs no las ponen a la venta, en este caso del Barça realiza un sorteo teóricamente escrupuloso, y el Athletic y la RFEF tampoco, acaso debería aclararse exactamente su procedencia. Como no es así y además se ofrece la posibilidad de poner a la venta a través de la propia web cualquier entrada para la final de la que se disponga, lo que se da a entender es la existencia de un auténtico mercadeo de entradas que, de algún modo, implica a los responsables directos de la repartición de las entradas, o sea los propios clubs y la RFEF. Es lógico, pues, que los socios se sientan estafados y engañados porque al final sólo es cuestión de dinero y no de fidelidad barcelonista que alguien pueda aspirar a una entrada que en realidad se pondrán a la venta entre los 50 y los 140 € pero que en Internet ya se pueden adquirir a precios que oscilan entre los 556 y los 865 €. El beneficio directo para los participantes activos en el proceso de intermediación de estas entradas resulta ciertamente indecente y escandaloso

EL NEGOCIO DE LA MLS

El director general del club azulgrana, Joan Oliver, no fue capaz de explicar con exactitud los detalles de la futura franquicia del FC Barcelona en la MLS, un proyecto que ya se ha convertido en polémico porque a los misterios que ya encerraba cuando fue destapado por pelikano.es días atrás y la forma en que el propio presidente la ha negociado, a espaldas de su propia junta directiva, se ha unido la denuncia de un ex directivo, Albert Vicens, subrayando que la directiva nunca estuvo al corriente las gestiones, que los informes sobre la MLS no invitaban precisamente a invertir en el fútbol USA, que es dudosa la asociación con el magnate boliviano Marcelo Claure y que finalmente, como insinúa en su artículo el propio ex vicepresidente, los estatutos del FC Barcelona exigen que sea la asamblea la que apruebe entrar a formar parte de una sociedad anónima como pretende Joan Laporta con esta operación.

Tampoco Joan Oliver, que habló de empezar a jugar en el 2010, aclaró porqué según la MLS las franquicias a las que opta el FCB son para el 2011, lo que seguramente guarda otro secreto no revelado que son las conversaciones con otras franquicias ya adjudicadas para un canje.

Oliver no negó en su comparecencia que, efectivamente, el Barça entrará a formar parte de una sociedad anónima mercantil según las leyes de los EEUU con una participación de entre el 30 y el 50%, a concretar, con idéntica participación también en los beneficios. Lo que no advirtió ante la prensa es que las leyes también estipulan que esa participación obliga a los accionistas a hacer frente a las pérdidas si las hubiera. El Barça aportará el control y estilo de la gestión del club, la gestión deportiva por completo y la generación de una identidad análoga a la del club azulgrana. Aseguró que no se trata de una operación comercial sino de consolidar la presencia de la marca Barça en un mercado tan importante como el americano, siempre según Oliver, con la perspectiva de globalizarla y captar patrocinadores también de alcance mundial. Sin embargo, el propio director general admitió que no podía afirmar con rotundidad que ese futuro equipo pudiera llamarse Barça, llevar los colores azulgrana y el mismo escudo, pues existen compromisos de exclusividad con Nike que lo impiden de momento y que chocan con acuerdos marco que la MLS mantiene con Adidas, principal esponsor de la liga americana, que captó a uno de sus iconos, David Beckham, para reforzar su imagen y su atractivo. Dicho de otro modo, el Barça podría realizar un gran esfuerzo y correr el riesgo de entrar en una sociedad con pérdidas con la intención de asentar la marca Barça pero verse en la obligación de renunciar a todos sus signos externos de identidad, lo que supondría en sí mismo un contrasentido evidente e inexpicable. La franquicia cuesta 40 millones $ que inicialmente pagaría Marcelo Claure, a falta de nuevos inversores. El director general del FCB confirmó que la sociedad Traffic, propietaria del Miami FC y entre otros jugadores de los derechos del defensa brasileño Henrique, que fue traspasado al Barça este verano, está interesada en invertir en esa futura franquicia barcelonista.

IMPRESENTABLE JOAN OLIVER

De la primera comparecencia del nuevo director general corporativo, Joan Oliver, hay que destacar su imperdonable actitud chulesca y de desprecio hacia una periodista del diario Marca por el hecho de haberle planteado una pregunta en castellano que, por lo que se ve, no fue del agrado del director general, una persona intolerante, radical, machista y maleducada que unos meses atrás ya dijo que “los españoles eran unos chorizos por el mero hecho de ser españoles”. Joan Oliver ha sido un fichaje personal del presidente Joan Laporta tras el despido de la ex directora general, Anna Xicoy, entre otras desavenencias por haberse negado a validar las condiciones del contrato entre el club azulgrana y el Bunyodkor de Uzbekistán negociador por el propio Joan Laporta. El nuevo director general, Oliver, nunca tiene un ‘no’ para Laporta como está demostrando.

8 DIMISIONES

MOCION.. IRREGULAR?

Un socio del FC Barcelona presentó una denuncia ayer ante el presidente de la Mesa de Censura, David Moner, por una presunta manipulación del censo electoral. El programa 'Sin concesiones' de la emisora RKB reveló que esta persona detectó que gente que no era socia del FC Barcelona votó. Según los primeros indicios del caso, el socio denunciante constató que en el censo del FC Barcelona se pueden quitar algunos nombres de gente extranjera que se sabía que no vendría a votar y poner el nombre de gente catalana que existe, con su DNI, pero que no es socia del Barcelona, lo cual se traduce en unas graves irregularidades en el censo electoral.

Moner: "No nos afecta"

David Moner, presidente de la Mesa, aseguró, en el mismo programa de RKB que "a nosotros ya no nos afecta. No me he leído su denuncia, pero este señor, al que no conozco, tiene su camino. Como Mesa, tenemos el derecho a contestar o no. Él puede apelar a la Federació Catalana en Apelación y puede ir también al Tribunal Català de l'Esport. Como no la he leído, no puedo decir nada". "Esto no me lo creo. El club no tiene por qué entregar a la Mesa un censo manipulado porque no tiene ningún sentido. Yo no soy quien para abrir una investigación. Si es que es así, este señor tuvo el censo abierto durante tres o cuatro días en exposición pública. Si no ha de decir nada es que es bueno", añadió

DIMISION EN MASA

Albert Vicens, en un comunicado en el que no ha aceptado preguntas, ha informado de la dimisión de ocho directivos del Barça: Marc Ingla, Ferran Soriano, Xavier Cambra, Evarist Murtra, Josep Lluís Vilaseca, Claudia Vives-Fierro y Toni Rovira. Son ocho de los dieciocho miembros de la junta directiva y hay tres vicepresidentes. Vicens ha destacado que pese al comunicado conjunto han renunciado de forma "individual"

El directivo, en un comunicado conjunto de los dimitientes, afirma que su decisión se debe a la "discrepancia en la manera de actuar surgida a partir del resultado de la moción de censura". Vicens afirma que hacía falta un "cambio sustancial no compartido por el presidente y demás directivos que siguen" en la directiva para lograr "estabilidad y paz social de forma inmediata y a medio plazo" que ha sido rechazada por Laporta.

Respecto a la decisión de seguir de Laporta afirma que "respetamos la legítima decisión del presidente" y ha deseado "que tengan acierto y éxito en su tarea" y ha pedido el apoyo al equipo ya que la "situación deportiva, económica y social es óptima". Vicens ha pedido "calma" y ha agradecido a "todos los empleados del club por su labor por el bien del Fútbol Club Barcelona".

Ya son catorce los directivos que han dimitido con Laporta

A pesar de la magnitud del hecho, la junta que preside Joan Laporta podrá continuar con su legislatura, ya que para haber provocado que la directiva hubiese dado paso a una junta gestora, hubiese sido necesario que hubiesen dimitido trece miembros.

La desbandada de directivos tras la reunión de hoy es la más numerosa que se recuerda en el Barcelona, por el hecho de haberse producido en el mismo día. De hecho la junta de Laporta ya había perdido en los anteriores años a seis directivos, cinco de los cuales Jordi Monés, Josep Maria Bartomeu, Sandro Rosell, Jordi Moix y Xavier Faus lo hicieron al finalizar la temporada 2004-05, mientras que Alejandro Echevarría lo hizo al año siguiente.

EL DIA " D"

Tres opciones para Laporta

Esa primera opción, que es más bien remota, pasaría por una dimisión de Laporta que calmaría los ánimos de los socios y permitiría seguir al resto de la junta.

Una segunda opción -también difícilmente asumible por Laporta- es que todos los miembros de la junta, incluido el presidente, asuman el compromiso de dimitir en agosto en la Asamblea de Compromisarios. Eso permitiría que se concretasen los fichajes y los traspasos, y que los socios aprobasen las cuentas del pasado ejercicio y el presupuesto para la temporada 2008-2009. Acto seguido, una Gestora convocaría elecciones.

La tercera opción, en estos momentos la más factible conociendo lo que piensan Laporta y sus fieles, es que el presidente se enroque y que, entonces, se produzcan dimisiones en la junta. En ese escenario se irían seguro Vicens, Cambra, Murtra, Vilaseca y Rovira, así como los vicepresidentes Soriano, Ingla, Ferrer y la directiva Clàudia Vives-Fierro.

Si se produjesen estas nueve bajas, a Laporta aún le quedaría su 'guardia de corps', formada por el vicepresidente Alfons Godall y los vocales Rafa Yuste, Albert Perrin y Alfonso Castro, a los que se unirían Joan Boix, Joan Franquesa, Josep Cubells y Jacint Borràs. Con estos apoyos el presidente podría seguir. Además ya tiene claro que Boix y Franquesa serían sus nuevos 'pesos pesados' si se van Ingla y Soriano.

INSISTE QUE NO SE IRÁ..